EL PANORAMA HISTÓRICO-PROFÉTICO DEL PUEBLO DE DIOS ATRAVESARÁ UNA SERIE DE VICISITUDES, PERO DE TODAS ELLAS SALDRÁ GANANCIOSO, PORQUE ELLOS HAN SIDO DESTINADOS PARA LA VICTORIA Y EL TRIUNFO POR LA EXPRESA VOLUNTAD DIVINA.

LIMA - PERÚ     MIÉRCOLES 25 DE OCTUBRE DEL 2017          MENSAJE # 2081

ESTER 4:4-8.

"Y vinieron las doncellas de Ester, y sus eunucos, y se lo dijeron. Entonces la reina tuvo gran dolor, y envió vestidos para hacer vestir a Mardoqueo, y hacerle quitar el cilicio, mas él no los aceptó. Entonces Ester llamó a Hatac, uno de los eunucos del rey, que él había puesto al servicio de ella, y lo mandó a Mardoqueo, con orden de saber qué sucedía, y por qué estaba así. Salió, pues, Hatac a ver a Mardoqueo, a la plaza de la ciudad, que estaba delante de la puerta del rey. Y Mardoqueo le declaró todo lo que le había acontecido, y le dio la noticia de la plata que Amán había dicho que pesaría para los tesoros del rey a cambio de la destrucción de los judíos. Le dio también la copia del decreto que había sido dado en Susa para que fuesen destruidos, a fin de que la mostrase a Ester y se lo declarase, y le encargara que fuese ante el rey a suplicarle e interceder delante de él por su pueblo".

=== Un descendiente del rey Agag, amalecita, había llegado a ocupar una posición más exaltada que la de los siete principales que asesoraran a Jerjes (Asuero), convirtiémdose en su mano derecha; y el personaje judío que tiene el protagonismo en este texto arqueotestamentario era un descendiente de Saúl, vale decir: Mardoqueo, era hijo de Jair, hijo de Simei, hijo de Cis, del linaje de Benjamín (Est.2:5). Otra vez la descendencia de Saúl habría de enfrentar a un amalecita por no haber borrado su memoria de sobre la faz de la tierra, aunque en esta ocasión el final sería diferente por la gracia de Dios. Y por causa de la obediencia a las leyes judaicas, era que Mardoqueo, primo de Ester, no se arrodillaba ante Amán; algo que éste asumiera a título particular, buscando deshacerse de aquel enemigo de varias generaciones, junto con toda la descendencia de la casa de Jacob. Habiendo concertado con el rey Asuero la erradicación y desaparición del pueblo judío, Amán disfrutaba con antelación su victoria y triunfo contra los judíos, porque la ley de Media y de Persia no puede ser abrogada, dando ello como un hecho consumado. Amán imaginó que había pensado en todo, y que su futuro en Persia estaba asegurado por muchas generaciones. La impiedad, suele no tener en cuenta a Yahweh, y cree que el deseo de su corazón no se podrá ver impedido; y aquel que imaginara ver a Mardoqueo colgado en una horca de 22.5 metros (para que todos lo vieran hasta muy lejos), pendería de ella como una vergüenza pública e imborrable por la explícita voluntad del rey.

=== Pero, veamos como se desarrollaron los hechos que derivarían en todo ello. Hecho y sellado el edicto del rey, con la redacción de Amán Hamedata agagueo, la suerte de todo el pueblo judío estaba echada. El luto, el llanto y los gemidos del judío Mardoqueo, y el de todos los que vivían en el imperio medo-persa, obedecían a una razón poderosa, sabiendo que el exterminio judaico ya era un acuerdo legal que nadie podría revocar. Ester, dentro del palacio, y ajena como estaba a los acontecimientos externos, se consternó al ver a su primo en esa condición, y quiso que se despojara del cilicio (ropas ásperas de color negro), y que se pusiera una ropa como la que él solía vestir, algo a lo que él se negó. La indumentaria externa no variaría para nada la razón de su dolor. Y entonces Ester envió a Hatac (Verdad era el significado de este nombre), para que indagara el por qué Mardoqueo estaba en esa condición; algo que el eunuco hizo con bastante diligencia, poniendo en antecedentes a la reina, quien dada las circunstancias, y por estar en la casa del rey, pensaba que podía salvarse; pero no sería así; y la preservación de la identidad no tardaría en descubrirse, siendo ejecutada por orden de su esposo. La destrucción del pueblo judío tenía fecha; y salir de ese atolladero lucía imposible para cualquier mente natural.

=== Toda la preparación que vino después, puso al pueblo hebreo en pie de guerra contra la injusticia que el rey refrendara en su ignorancia. Tal era la confianza que Asuero sentía por Amán, que ni siquiera indagó sobre el particular; hasta que una arriesgada y heroica Ester se presentó en el patio del rey sin ser llamada, hallando, no la muerte; sino la anuencia del rey quien la recibiera con la dulzura que sólo la intimidad de ambos conocía (el ayuno de tres días implorando el favor de Yahweh, dio un resultado más amplio que el esperado), poniendo la suerte del pueblo hebreo en la mano benevolente del rey, quien los instruyera sobre la impasibilidad de revocar el edicto; pero la posibilidad de hacer otro, poniendo a los descendientes de Abraham en la libre capacidad de defenderse de sus enemigos, y de apoderarse de sus bienes; cosa que no hicieron en la parte segunda, porque ellos habían pedido la posibilidad de defenderse, y no la de enriquecerse a costa de otros. Las cosas que hacemos entre el tiempo del juicio, y el de nuestra defensa, determinarán el fin de todo esto. Dios no nos está diciendo: ¡Déjate asesinar!; antes bien nos dice: ¡Defiéndete con los recursos que yo pongo a tu disposición para que vayas de triunfo en triunfo!

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA      25/10/2017             MENSAJE # 2081