LA CAPACIDAD DE SÍNTESIS DEL DOCTOR LUCAS NOS MINISTRARÁ SOBRE TODAS LAS COSAS QUE SON NECESARIAS PARA ESTAR APTOS COMO REPRESENTANTES DEL SEÑOR ANTE UN MUNDO NECESITADO. HEMOS DE LLEVAR TODA LA ARMADURA PUESTA Y DISPUESTA PARA OPERAR EFICAZMENTE CUANDO EL CASO ASÍ LO REQUIERA. NOSTROS ESTAMOS COMPLETOS EN ÉL, Y LA PRESENCIA DEL PARACLETO ES INTRINSECAMENTE NECESARIA PARA UN EFICAZ OBRAR.

LIMA - PERÚ     MARTES 24 DE OCTUBRE DEL 2017             MENSAJE # 2079

HECHOS 1:1-5.

"En el primer tratado, oh Teófilo, hablé de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar, hasta el día en que fue recibido arriba, después de haber dado mandamientos por el Espíritu Santo a los apóstoles que había escogido, a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios. Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí. Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros eréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días".

=== El doctor Lucas, historiador de la iglesia, refiere una vez más a su destinatario, todo lo inherente a lo que Jesús el Cristo había hecho, y del programa de acción que cabría a futuro a sus elegidos en el ministerio apostólico, los cuales serían activados por el Espíritu Santo que habrían de recibir en la fiesta de Pentecostés, mostrando así la exactitud cronométrica del divino fluir en cuanto a su propósito. El 14 de nisán, la Pascua; el 15, la fiesta de los Panes sin levadura; el 17, la fiesta del Nuevo Grano o de las Primicias; y cincuenta días después, la fiesta del Pentecostés, que es lo que Jesús referirá en el verso 5, que fue el mismo día en que Moisés recibiera las tablas del pacto allá en el Sinaí. Con Dios no hay casualidades, todo entra dentro de la cronología humana en el tiempo predeterminado por él, a su sazón, y conforme a su poder soberano. La metodología del Señor, detallada aquí por Lucas, era la de hacer, y la de enseñar. La fiel demostración de su labor y potestad, exigía que el Señor presentara sus credenciales con las palabras y las señales que las refrendaran, haciendo notorio que el reino de Dios se había acercado en la persona de su Rey y Señor como el más fidedigno representante del anhelo divinal. El verdadero ministro ha de evidenciar su fluir mediante la práctica visible y manifiesta de las dotaciones recibidas de arriba, para luego pasar a enseñar a los demás el cómo esto se hace posible entre los que han creído: "Y estas señales seguirán a los que creen en mi nombre: Echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán" (Mr.16:17-18).

=== Para el día en que Jesús fue llevado al cielo (diez días antes del Pentecostés), el Señor ya había dado los mandatos que habían de ejecutarse por los que habían recibido la autoridad delegada (me refiero a los apóstoles), la misma que habría de impartirse por la presencia del Espíritu Santo en todos los creyentes. Jesús siguió ciertos parámetros. Después de su padecimiento (pasión, crucifixión, sepultación y resurrección), se presentó vivo, ofreciendo pruebas irrefutables de que era él, que había vencido a la muerte, y que en breve tendría que reunirse con el Padre hasta su segunda venida, estuvo hablándoles acerca de un único tema; EL REINO DE DIOS, entrando en aquellos detalles que en vida no les notificara, pero que ahora podían ver efectuado por el poder de la resurrección, por aquella vida genérica que no podía más morir, y cuyo ámbito se hallara en la gloria, al lado del Padre, donde somos llamados a vivir como el mismo Jesús lo hiciera, no sintiéndose limitado por su cuerpo, sino usándolo como fiel ministrador de la divina bondad. El cuerpo no es neutral, como lo conjeturan los gnósticos, sino que es el templo del Espíritu Santo, el portátil altar que va contigo dondequiera que vayas, al estilo de Josué: "Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Yahweh tu Dios estará contigo dondequiera que vayas" (Jos.1:9).

=== "No se vayan de Jerusalén, esperen la Promesa del Padre".- Aunque esto parezca un arresto domiciliario para los más efusivos religiosos carnales; y un deleite para los cristianos pasivos que mientras más flojos son, más "espirituales" se creen; para la Deidad encarnada implicaba una dinámica que no debía ser olvidada. Así como una lavadora automática está ya programada para toda su labor limpiadora, lavadora, enjuagadora y centrifugadora, sin que necesitemos tocarla; así también es el programa divino, con fechas y horarios exactos, ejecutando a plenitud la voluntad soberana del Padre; haciéndolo todo conforme a lo acordado, obteniendo su beneplácito. Así como el bautismo en agua representara nuestra identificación con el Señor en cuanto al lavamiento de la regeneración, hemos de darnos la opción de dejar que el Espíritu Santo nos renueve hasta alcanzar la plenitud santificante que nos lleva al nivel de herederos del reino como gente plenamente santificada, pudiendo ver a Dios al haberle agradado al moverse conforme a su voluntad.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA          24/120/2017         MENSAJE # 2079.