LIMA - PERÚ VIERNES 17 DE NOVIEMBRE DEL 2017 MENSAJE # 2127
TITO 1:1-4.
"Pablo, siervo de Dios y apóstol de Jesucristo, conforme a la fe de los escogidos de Dios y el conocimiento de la verdad que es según la piedad, en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no miente, prometió desde antes del principio de los siglos, y a su debido tiempo manifestó su palabra por medio de la predicación que me ha encomendado por mandato de Dios nuestro Salvador, a Tito, verdadero hijo en la común fe: Gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y del Señor Jesucristo nuestro Salvador".
=== Esta salutación paulina está llena de doctrina y de precisiones sobre lo que es el orden divinal entre los miembros del ministerio, y debido a ello, vamos a prestarle nuestra atención, de modo que seamos instruidos como parte del cuerpo de Cristo, y nos unamos al fluir corporativo acomodándonos a las apostólicas premisas. Pablo procede a identificarse aduciendo su labor como siervo o esclavo voluntario del Señor, y en ello no hay falsa humildad ni presunción, sino una exacta representación con la modestia como su uniforme de faena; luego, nos participa su condición de ENVIADO DIVINO (APOSTOLOS), implicando que es un siervo de Dios con autoridad delegada en el nivel más idóneo; y luego prosigue con esta mención vital que lo hace uno con nosotros, los escogidos de Dios, quienes ostentamos un grado de fe que nos honra y singulariza en el contexto de la elección (ello es el centro de gravedad de nuestra funcionalidad como agentes divinos), y luego se extiende al panorama revelacional que se ha hecho real en nuestra experiencia, y que tiene aplicación real y tangible en nuestro estilo de vida pues aquel que tiene esto en su ser, debe andar como él anduvo; de lo contrario, todo lo que vivamos se disolverá en lo insustancial. El cristiano no teoriza, fabula o alucina respecto a la vida que agrada a Dios, sino que se integra a la misma, constituyéndola en su norma conductual y en aquello que afecta todo su modo de vivir. Los fariseos decían, y no hacían; y los oidores no hacedores, no cuentan en la esfera del reino. El conocimiento de la verdad, según la piedad, forja nuestra identidad, revelando que tenemos la esperanza de la vida eterna actuando en nosotros, guardándonos del mal, y actuando en conformidad con las divinas ordenanzas.
=== A renglón seguido, el apóstol declara que Dios es su fuente, y que él nunca miente, haciendo su revelación y declaración irrefutable en todos sus términos, y al volver en la distancia, arguye que esto es algo que tuvo su origen antes de que el tiempo tuviera su inicio en calidad de tal. Así el Señor envolvió con el manto de la promesa aquella premisa secreta que debería manifestarse en el concierto de las edades, en el panorama generacional correspondiente. Y así como el sol y la luna aparecieran en el cuarto día, el Sol de Justicia hizo lo mismo, y Pablo fue el elegido para manifestar el evangelio del reino entre los gentiles, evidenciando la gracia a favor de toda la humanidad. siguiendo el mandato divinal para el curso de la presente edad, algo que el apóstol reafirma con estas palabras: "... Por mandato de Dios nuestro Salvador" (Tit.1:3). Pongamos en nuestros corazones todas estas verdades, y mantengámonos en ellas en el trámite de nuestra peregrinación.
=== Al llegar al verso 4, el apóstol hace referencia al destinatario: Tito, a quien identifica como a un hijo en la fe que les es común a los santos, y por lo tanto, digno de confianza, dándole una triple bendición, la que no es una elemental cortesía, sino una bendición que Dios y su siervo quieren colocar en este servidor ubicado por ese tiempo en Creta:
(I) Gracia.- Esto es el todo de Dios para efectuar en nosotros su deseo, compartiéndonos su favor, su perdón, su unción y su plenitud.
(II) Misericordia.- La manera en la que Dios suple cada necesidad que va surgiendo diariamente, reacomodándolo todo para que salga conforme a la voluntad de él.
(III) Paz.- Siendo esta el resultado que permite que la relación con el Padre continúe sin pausa, haciéndonos cien por ciento efectivos. Así, pues, el Padre y el Hijo, van interactuando con nosotros para obtener los fines prefijados y cubrir el propósito eternal.
EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA 17/11/2017 MENSAJE # 2127
LOS VALORES ETERNOS SON UN TESORO PARTICULAR PARA CADA CREYENTE, PARA CADA MINISTRO, Y HAN DE SER MANTENIDOS EN ALTO A LO LARGO DE NUESTRA PEREGRINACIÓN, COMPONIENDO LA CERTEZA DE NUESTRA ESPERANZA.
ResponderEliminar