jueves, 23 de noviembre de 2017

TODOS LOS BUENOS PRODUCTOS QUE SALEN AL MERCADO, SON PROBADOS EXHAUSTIVAMENTE ANTES DE ELLO. EL DESEO EMPRESARIAL ES EL DE GARANTIZAR LA BONDAD Y LA MAGNÍFICA CALIDAD DE SUS PRODUCTOS. EN LA VIDA CRISTIANA, TODAS LAS PRUEBAS TIENEN UNA OBJETIVIDAD, PRESENTARNOS COMO COMPLETOS EN CRISTO JESÚS.

LIMA - PERÚ    JUEVES 23 DE NOVIEMBRE DEL 2017       MENSAJE # 2139

SANTIAGO 1:2-8     (VERSIÓN REINA-VALERA CONTEMPORÁNEA)

"Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando estén pasando por diversas pruebas. Bien saben que cuando su fe es puesta a prueba, produce paciencia. Pero procuren que la paciencia complete su obra, para que sean perfectos y cabales, sin que les falte nada. Si alguno de ustedes requiere de sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios se la da a todos en abundancia y sin hacer ningún reproche. Pero tiene que pedir con fe y sin dudar nada, porque el que duda es como las olas de mar, que el viento agita y lleva de un lado a otro. Quien sea así no piense que recibirá del Señor cosa alguna, pues quienes titubean son inconstantes en todo lo que hacen".

=== Santiago, hace un saludo en general a todas las tribus de la diáspora (y con ello a todas las localidades eclesiales dondequiera que se ubicaran), y entrando en materia, se llega a los santos con un saludo fraterno que los eleva a su posición como hijos de Dios. Al tocar el punto de las pruebas, no dice que estas sean prerrogativas de los ministerios más altos, o de una élite; sino que las universaliza, exponiéndolas como el control de calidad con el que todos somos procesados en pos de la completa aceptación y la oportuna madurez. Las pruebas no te hacen especial entre tus hermanos, ni menos que a los demás; nos acontecen a todos los que vamos avanzando en línea a la gloria, formando parte de nuestro entrenamiento como soldados de Cristo, y como gente que está siendo curtida en los azares de la guerra, obteniendo veteranía y suficiencia para hacer frente a nuestros antagonistas: El mundo, el diablo y la carne. Las pruebas forjan en nosotros una fortaleza, una rebeldía contra los azares, una disposición para luchar, y hacernos conscientes de la victoria que se obtendrá por mantenerse firmes en la brega, viendo cómo toda adversidad se va retirando gradualmente, hasta recuperar el territorio que nos hubiera sido quitado por el temor, la duda y la incredulidad; resultando todo ello en una firmeza de carácter, en plena certeza de la esperanza, y en el despliegue del estandarte que señala nuestro triunfo sobre toda fuerza enemiga u opresora.

=== El resultado de la prueba debe llegar hasta su etapa final, de modo que obtengamos algo pleno. El pedirle a Dios que nos aparte de las pruebas, no es un acuerdo escritural, ni parte del intento divino. El superar las mismas, y el alcanzar victoria es el sentido con que éstas nos son dadas, algo que Santiago describe como perfección y cabalidad, de modo que seamos integrados a la realidad del reino de Dios en virtud, sentido y experiencia. Si la sabiduría (el uso consciente de los valores prácticos a su sazón) está ausente; no seamos tímidos ante el Padre, y busquemos ser premunidos de ella, a fin de ofrecerle un mejor servicio, y una total eficacia en lo que hacemos para la gloria de su nombre. Dado nuestro vínculo con la Deidad, y el conocimiento que de él tenemos en lo tocante a su poder y fidelidad, no podemos acercarnos a él en un plano vacilante, dubitativo o incierto, pues su Paternidad y sus Promesas son recursos que él ha puesto a nuestra disposición, ofendiéndolo cuando dudamos de su bondad y su providencia para con cada uno de nosotros. Cuando Santiago pone como ejemplo las ondas del mar en su continuo vaivén, nos muestra la naturaleza pendular típica de la inconstancia, y donde debiera haber una línea recta y continua, vemos líneas segmentadas y dispares que nada definen y todo postulan.

=== El fracaso de nuestra vida espiritual es diagnosticado aquí como una falta de fe en el divino obrar; no es que al Padre le falte el poder o la buena voluntad característica de su gracia; sino que no le damos las coordenadas correctas para que su bendición nos cubra, y obtengamos aquello que tanto precisamos para satisfacer su deseo, y no el nuestro, basado en un personal egoísmo que busca la autosatisfacción, mientras intentamos utilizar a Dios para nuestro provecho; y Dios no entra en nuestras grises componendas. El Padre está dispuesto a bendecir aquello que en definitiva contribuya al cubrimiento de su propósito, haciendo que nuestra participación sea un éxito. Pero todo aquello que profana su beneplácito no verá la gloria que sólo está aparejada para lo que él planificara en la eternidad pasada.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA           23/11/2017          MENSAJE # 2139.

1 comentario:

  1. LAS PRUEBAS DE NUESTRA FE SON EL EQUIVALENTE A LAS FASES CRÍTICAS QUE HEMOS DE EXPERIMENTAR PARA LLEGAR A LA MADUREZ, COMPLACER AL PADRE, Y CONVERTIRNOS EN INSTRUMENTOS DE SU PAZ.

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