martes, 16 de enero de 2018

AQUELLO QUE HEMOS RECIBIDO POR PARTE DE LA DEIDAD, EN CALIDAD DE DÁDIVAS Y DONES, ES PERFECTO Y SIN ERRORES; PORQUE DIOS NO SABE HACER ADEFESIOS; SINO QUE ES BUENO EN GRAN MANERA.

LIMA - PERÚ     MARTES 16 DE ENERO DEL 2018        MENSAJE # 2247

SANTIAGO 1:16-18.

"Amados hermanos míos, no erréis. Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación. Él, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas".

=== El autor no se presenta como un apóstol del Señor, o alguien con suprema autoridad; sino como un hermano en Cristo que cuenta con la experiencia necesaria para impartir enseñanzas que serán útiles a todos. El hermano físico del Señor Jesús (por parte de madre), es el encargado de la congregación jerosolimitana, fungiendo como tal como el pastor y maestro local, fluyendo al lado de los apóstoles como un celoso guardador del orden divino, y un sereno y maduro ilustrador del fluir eclesial local. En esta porción quiere corregir ciertas imprecisiones en lo tocante a las dotaciones que cada creyente ha recibido de parte de Dios, las cuales han de usarse en la armonía corporativa para la edificación del pueblo de Dios; y no para contender o competir entre ellos para ver quién es el que más destaca. Todo lo que Dios ha impartido a cada uno de sus hijos a nivel eclesial debe ser interpretado e identificado como UNA DÁDIVA, como parte de la divina bondad que fructificará para la gloria de Dios; y no como parte de una meritocracia, o de una jerarquía que ponga a algunos por encima de otros. Los cristianos nos sometemos a la autoridad que Dios ha delegado, de modo que el divino fluir pueda utilizar independientemente a los vasos del Señor, a cada uno con su dotación dentro de los parámetros cultuales que resultan en edificación, exhortación y consolación que conducen a  la piedad como una manera de vivir que le da a la comunión fraternal el lustre y la gloria que el Padre se complace en mostrar cada vez que actúa entre nosotros, motivándonos al amor y a las buenas obras.

=== La dádiva que es clasificada como buena (implicando su naturaleza, función y propósito), es también reconocida como don perfecto (no es producto del error o de una falla divinal); sino como aquello que Dios hizo para un fin prerdeterminado; no procede de las partes más bajas de la tierra, ni de las profundidades del mar; ni de la lobreguez de la nocturnidad; sino que VIENE DE LO ALTO, como una referencia al plano divinal, celestial en el que mora la Deidad, y cuando se refiere a Dios como el Padre de las luces, indica la naturaleza espiritual de él y de los seres creados, separados y redimidos, elegidos y predestinados para ejecutar su voluntad en el trámite de las edades; arguyendo su invariabilidad en el accionar, como una premisa fija, una promesa incambiable, como una realidad inmutable, que mantendrá su propósito de un modo inalterable. Dios "no salta de un individuo a otro, buscando su mejor posibilidad, o disculparse por un hipotético equívoco". El que ve las cosas desde la eternidad hasta la eternidad, elige en una forma plenamente consciente a sus protagonistas, ubicándolos en el concierto de las edades para el cubrimiento de su beneplácito; y no hay piezas de recambio o algún plan "B". El Padre posee la cualidad de la plena definición, y lo que él determina, se cumple a cabalidad, aparejándolo todo mediante su Soberanía (Hch.2:22-24).

=== Su Soberana Voluntad nos trajo a existencia por medio de la pronunciación Verbal (Cristo como Verbo Divino, que compone tanto la promesa como la herencia). Todo lo que tiene existencia, tanto en el plano visible como el invisible lo tiene a él como su fuerza causativa: "Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. En él estaba la VIDA, y la VIDA ERA LA LUZ de los hombres" (Jn.1:3-4). ¿Nos acordamos del PADRE DE LAS LUCES? Así como el milagro de la vida se oficia por la apertura de la zona genital femenina para abrirle paso a lo que llevara dentro por espacio de nueve meses; así también la boca de Dios se abrió para declarar nuestra existencia como algo grato y maravilloso para él. Y aquella Palabra Verdadera nos hizo PRIMICIAS DE SUS CRIATURAS, poniéndonos en una CONGREGACIÓN DE PRIMOGÉNITOS, en la que  él tiene la preeminencia.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA        16/01/2018        MENSAJE # 2247

1 comentario:

  1. LA SENCILLEZ DEL LENGUAJE SANTIAGUINO NOS LLEVA A VISUALIZAR CON GRAN PROFUNDIDAD LOS VALORES DE LAS DÁDIVAS DIVINAS, Y EL USO APROPIADO DE NUESTRAS DOTACIONES PARA DARLE A DIOS LA GLORIA QUE SE MERECE.

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