LA OBRA DE DIOS ES PERFECTA, PERO AQUELLOS QUE ESTAMOS CAMINANDO EN SUS ORDENANZAS, HEMOS DE MANTENERNOS EN EL CENTRO DE LAS MISMAS PARA ASÍ OBTENER NUESTRA HERENCIA COMPLETA. AL MANTENERNOS FIRMES Y SIN FLUCTUAR EN LA PROFESIÓN O CONFESIÓN DE NUESTRA ESPERANZA.

LIMA - PERÚ    JUEVES 25 DE ENERO DEL 2018       MENSAJE # 2265

SEGUNDA DE JUAN 7-9.

"Porque muchos engañadores han salido por el mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Quien esto hace es el engañador y el anticristo. Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo, sino que recibáis galardón completo. Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo".

=== Mientras que los mensajeros del gnosticismo se expresan con todos los supuestos que sus mentes enfervorizadas son capaces de contener. no dándole límites a su imaginación, la misma que se dispara en distintas direcciones para difundir el mensaje sin llegar a un punto específico, ni en lo individual ni en el panorama relacional divino-humano; la doctrina de Cristo se concentra en la individualidad del Salvador, a quien Juan reconoce como EL VERBO DE DIOS o LA PALABRA DE DIOS EXPRESADA ANTROPOMÓRFICAMENTE, o DIOS MANIFESTADO EN CARNE, para hacerlo más simple; buscando su contacto con nosotros en una forma inteligible, acorde con nuestra posición y dignidad como hijos de Dios, y como reyes y sacerdotes, que rigen y median para que la humanidad entera retorne a su comunión con el Creador-Redentor. La naturaleza tripartita de quienes han sido iluminados con la doctrina de Cristo, no elimina una parte de sí para sentirse bien consigo mismo (como hace el gnosticismo con el cuerpo físico, al que considera sin valor alguno, y que jamás ve como el templo de Dios), al condenar al cuerpo físico a un final ostracismo, se alivian del problema del pecado, no requiriendo de la redención, con esa su absurda filosofía en la que son juez y parte. De allí que a ellos les resultara simplemente imposible admitir que la Deidad llegara a presentarse en forma humana. Esta es la doctrina del engaño y del anticristianismo.

=== La realidad de la manifestación de Dios en forma humana, hace trizas las doctrinas falsas y fatuas del perverso gnosticismo. Nuestra confesión de fe, nos aisló del mundo profano, de sus absurdas convicciones, y de su idolatría, sacándonos de la esfera común para integrarnos a las realidades neocreacionales que componen el cuerpo de nuestra doctrina. Las fantasías, en la forma de lenguaje insustancial, seguirá girando en las mentes llenas de fabulaciones, quimeras y filosofías que pretenden mucho, y que no tienen nada. El engaño satánico del Edén a la primera pareja: "Seréis como Dios" (Obsérvese que Satán no dijo "dioses"; porque sabía que en esa esfera no podía ser descarado con la inteligencia de la pareja edénica, que sabía que había solamente un único Dios: Yahweh), sigue dándole resultados a la serpiente con alas, llevándolos al absurdo de que se pueden convertir en dioses desobedeciendo el orden divinal. La ilusión les costaría cara. La instancia para que seamos prudentes MIRANDO POR NOSOTROS MISMOS, nos devuelve al plano de la responsabilidad, para que todo lo actuado en el Señor siga manteniendo su vigencia mientras es transportada por la fidelidad hasta el plano de la total aceptación EN EL AMADO (Ef.1:6). Dios no nos está ofreciendo recompensas porcentuales. o una corona quebrada en varios pedazos, o unas pepitas de oro para que mandemos hacernos una con algún joyero. Él quiere que disfrutemos nuestros galardones y recompensas a plenitud.

===El extravío siempre será consecuencia de no perseverar en LA DOCTRINA DE CRISTO, la misma que compone nuestra absoluta seguridad para la obtención de la herencia. Así como en todo lo inherente al plano terrenal hay cíclicas recurrencias; así también en nuestro panorama generacional el Padre reproduce las cosas que nos integrarán a su plan y propósito, marcando derechos y privilegios, y deberes y responsabilidades, para que operemos a su sazón y cubramos nuestro rol protagónico como hijos amados de Dios. El TENER A DIOS implica el gobierno de él sobre nosotros, moviéndonos en su concierto, siendo el VIVIR EN CRISTO, lo que sigue en aquella marcha a la gloria que comenzara con nuestra redención en el Calvario, colocando en nosotros fidelidad y persistencia hasta la llegada a la meta, dejando que aquel que mora en nosotros haga su obra perfecta, mostrando el perfecto orden célico-pedestre, donde el Padre manda, el Hijo obedece, y el redimido ejecuta, completando así la gloria de Dios en nuestras vidas.

EFRAÍN ARTURO CH;ÁVEZ ESPARTA        25/01/2018       MENSAJE # 2265.