martes, 30 de enero de 2018

EL DIVINO ANÁLISIS NO PARECE COINCIDIR CON LA RELIGIOSA INTROSPECCIÓN LAODICENSE. ¿POR QUÉ? PORQUE SUS OBJETIVOS HAN DEJADO DE SER LOS MISMOS; Y EL PADRE TIENE UN SINO PREFIJADO PARA SUS HIJOS Y SIERVOS, AL CUAL DEBEMOS DE TORNAR PARA EL CUBRIMIENTO DEL PROPÓSITO DIVINO.

LIMA - PERÚ    LUNES 29 DE ENERO DEL 2018        MENSAJE # 2273

APOCALIPSIS 3:14   (VERSIÓN REINA-VALERA CONTEMPORÁNEA)

"Escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: Así dice el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios: Yo sé todo lo que haces, y sé que no eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! Pero como eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Tú dices: 'Yo soy rico, he llegado a tener muchas riquezas. No carezco de nada'. Pero no sabes que eres un desventurado, un miserable, y que estás pobre, ciego y desnudo".

=== Las cartas que dirigiera el Señor a las siete iglesias de Asia, son de importancia vital para conocer el divino fluir en el contexto de su relación con él en el decurso de la presente dispensación, de la gracia que preludia al reino. De allí la demanda para que todos lleguen a coronar como vencedores, siendo ello lo que compone su dignidad en su panorama relacional. Nótese que Jesús le dirige la carta al mensajero local (ángel), porque es por medio de él (las siete estrellas en su mano derecha) que la congregación es orientada para el agrado divino pertinente en cada localidad. Los títulos conque el Señor se dirige a la congregación comportan su mensaje: El Amén (esto es el 'Así sea', la total conformidad con lo planteado por la Deidad para el cubrimiento de su propósito), el Testigo fiel (el que vio, oyó y palpó todo lo inherente a lo que el Padre quería hacer), Verdadero (Legítimo, honesto, genuino, sin variable alguna), el Principio de la creación de Dios (autocalificándose como EL PROTOTOKOS, o la causa inicial de todo lo existente con el género vital que Adán arruinara, y que él recobrara vía la redención). Ese es el que le está escribiendo al mensajero de Laodicea; para comunicarle su condición, y hacerle saber que hay cosas que tienen que ser tratadas urgentemente. La tibieza espiritual es algo que indigna al Dios vivo, porque indica que las personas están a la mitad de algo, que no los separa suficientemente de la esfera secular religiosa; ni los identifica como el pueblo de Dios al que se les ha impartido sana doctrina, y una correcta perspectiva.

=== Jesús refiere que él conoce todo lo inherente a la vida personal del ministro local, y también la forma en que la grey está siendo conducida, habiendo sido seducida por la prosperidad material, mirándose a sí misma como una localidad autárquica, que ya no siente necesidad de la divina participación, sintiéndose satisfecha en el orden natural y religioso, omitiendo el plano espiritual que debiera comandar sus acciones y regir su andar. Aquella tibieza espiritual no era desconocida para Jesús, y les revela que su condición, de no variar, los llevará a la desaprobación y la expulsión de la congregación, que todavía el Señor reclama como suya; pues si fuera de otro modo, ni siquiera la mencionara. Cuando el Padre le advirtió a la nación judía sobre su disgusto con ellos, refirió que aquella tierra sabía vomitar a sus pobladores, cuando estos no obedecían su voz ni guardaban sus leyes. Algo semejante se prepara para los laodicenses, quienes habían cambiado su dicha material por el favor divino, asumiendo que ya no lo necesitaban. La voz de ellos argumenta que se sienten y saben ricos, y que no tienen necesidad de nada. Asumiendo que Dios debía contentarse con los rituales y la liturgia, aunque ellos no pusieran su corazón en ello. Su espejo natural les devolvía una buena auto imagen, habiendo perdido su perspectiva como pueblo de Dios.


=== El Señor les hizo una auscultación gratuita, y esto fue lo que encontró:
(1) Desventura.-Toda su dicha no fue originada por Dios, porque si hubiera sido así, ellos seguirían pendientes de la Deidad para serle agradables en espíritu, alma y cuerpo, privándolos del adecuado y deseado norte.
(2) Miseria.- Es Dios quien provee para sus hijos la riqueza dentro de la proporcionalidad divina. la abundancia de ganancias materiales no nos sacia, antes bien genera ansiedad por tener más. Ya no te preocupa cuánto tienes; sino cuánto no tienes, llevándote a la codicia.
(3) Pobreza.- Material, no; espiritual, sí. Tu aislamiento de las bondades divinas te llevan a una total insatisfacción.
(4) Ceguera.- Sobre las posibilidades que, si vinieran de Dios, no te habrían traído tanta tristeza al alma.
(5) Desnudez.- Todas tus posesiones revelan que tu único interés era hacerte rico, y que los valores celestiales no tienen atractivo para ti. Los ladrones, la polilla y el orín, suelen despojarnos y dejarnos en un estado paupérrimo.

EFRAÍN ARTURO CHÁVEZ ESPARTA        29/01/2018       MENSAJE # 2273

1 comentario:

  1. SI NOS PONEMOS DE ACUERDO CON EL PADRE SOBRE LOS VALORES DE LA VIDA CRISTIANA, Y NOS MOVEMOS EN ELLO EN CONFORMIDAD CON SU VOLUNTAD, LA COMUNIÓN DEL PADRE SERÁ PERENNE, Y TENDREMOS PROSPERIDAD CON FELICIDAD.

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